¿Desierto Merzouga o Desierto Tagounite? ¿Qué entrada al desierto de Marruecos es mejor?

Ya habíamos recorrido Marrakech, el Atlas, Ouarzazate, Valle del Draa, Ait Isful con los expedicionarios de la I expedición de El Club de la Aventura de Atomarpormundo y el viaje por Marruecos continuaba, cuyo objetivo final era llegar al desierto. Pero, ¿qué entrada al desierto de Marruecos es mejor? ¿El desierto por Merzouga o por el desierto por Tagounite?

Nosotros lo tuvimos claro desde el principio cuando preparamos este viaje a Marruecos: de las puertas del Sahara elegimos Tagounite. Es mucho menos turístico, más tranquilo aún, no quads ni buggies, más barato e igual de bonito con sus hermosas y salvajes montañas de dunas.

En Tagounite los niños corretean entre dunas camino de la escuela con una gran sonrisa que les acompaña. No llevan libros, solo una ilusión tremenda. Solo llevábamos unos días en Marruecos pero los suficientes para que todos los expedicionarios se quitaran el reloj o, al menos, hayan olvidado la noción del tiempo. Para hacer tiempo, precisamente, hasta que estuviéramos todos, MJ y un servidor, organizadores de la expedición, caminamos hasta el colegio que estaba relativamente cerca del campamento donde nos alojábamos y de Tagounite. Estaban en el recreo, todos juegan, saltan, ríen… Nos recargan las pilas ver tanto disfrute por la vida.

Tagounite

Desde el campamento, a primera hora, toca caminar hasta el vecino pueblo de Tagounite. Allí nos espera la familia de Abderrahim, nuestro anfitrión. Antes del medio día ya estamos allí. En la puerta nos reciben la madre y las hermanas. Hay un salón, varias habitaciones y un patio, espacio suficiente para que todos los expedicionarios invadan la casa.

Mientras, con esmero y cariño preparan, como la cocina de nuestras abuelas, albóndigas de kefta de cordero. Delicioso manjar que nos lleva a un viaje al pasado, a los días en los que la olla tenía más importancia que los microondas. Que no se olvide nunca, herencia que recibimos de ellos, muchos de los ingredientes, platos y concepción de la comida.

Qué ver en Tagounite

Poco a poco se iba acercando el momento. La puerta del desierto salvaje ya se vislumbraba al fondo del paisaje. Por la tarde paramos en la kasbah de Oulad Driss (20 dírham entrada al museo con taza de té incluida), que dejaron en propiedad los judíos a los musulmanes cuando se marcharon de ella al dejar de perseguirlos y en la que todavía viven como hace cientos de años. Cuando salimos de entre las casas de adobe y paja, dos bereberes tiraban de sendos dromedarios. Era la señal. ¡El desierto nos espera!

Alrededor de Tagounite hay unas 65 kasbahs, donde muchas están aún habitadas llevando un estilo de vida muy ancestral. También a unos 20 kilómetros puedes visitar la necrópolis de Foum Rjan de tiempos prehistóricos.

Qué hacer en Tagounite

Caía la tarde y la mejor luz nos acompañó en el viaje. Dejábamos atrás la civilización, pequeños pueblos en torno al desierto, y nos adentramos en una caminata en la hammada, un paisaje pedregoso que, por momentos, se tornaba en pequeñas dunas, un prólogo perfecto a lo que faltaba por llegar. En el camino, que es tan importante como el destino, la naturaleza se apoderó de los expedicionarios. La luna, que lucha por crecer hasta estar completamente llena, y las miles de estrellas, amansaron las ansias de control del mundo occidental y, por primera vez, se dejaron llevar… y probamos la arenoterapia, entre otras cosas que se nos iban ocurriendo sobre la marcha.

La noche no quedó en silencio hasta la madrugada. Los tambores y las castañuelas sonaran al calor del fuego de campamento hasta que las fuerzas aguantaron. Solo después sucumbimos ante el fastuoso silencio del desierto. Al día siguiente lo íbamos a disfrutar en toda su plenitud (ver siguiente post). De esas grandes dunas de Erg Chegaga que fueron en su día pistas del famoso rally París – Dakar.

¿Qué te ha parecido nuestro post sobre el debate entre el desierto Merzouga y desierto Tagounite? ¿Alguna duda? ¿Incluirías algo más para este viaje? ¡Cuéntanos! Estamos deseando leer tus consultas, propuestas y experiencias. ¡Deja tu comentario más abajo!

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