Qué ver en Seychelles, el paraíso que tienes que visitar una vez en la vida

Si buscas en el diccionario el significado de paraíso, probablemente la definición venga acompañada con un ejemplo, las Islas Seychelles. Tierra de tesoros escondidos, espacio de inspiración para artistas, patrimonio natural único y lugar de playas que dejan sin palabras. Un sitio de los que vas de viaje y nunca encuentras buen momento para volver a casa. Por eso ahora vamos a rememorar nuestros días en el nirvana para contarte que ver en Seychelles, el país que tienes que visitar, al menos, una vez en la vida.

Mejores playas de Seychelles

Seychelles tiene 115 islas en total, de ellas solo 33 son habitables. Y de esas, no todas son accesibles para el viajero. Por lo que vamos acortando la lista. De todas estas queremos hacer un resumen de las mejores playas de Seychelles, para que elijas dónde quieres que esté tu paraíso.

Mahé

La Isla de Mahé es la más grande. Aquí vive el 90% de la población del país. Muchos turistas llegan en avión a Mahé, donde está situada la capital y el Aeropuerto Internacional, pero huyen a otras islas. Lo cierto es que Mahé ofrece la estampa más genuina de las Seychelles, en donde se saborea la vida local a la vez que disfrutas de buenas playas y un paisaje verde descomunal.

Es una isla grande y, para moverte, podrás usar el transporte público (no llega a todas las playas y los conductores tienen fama de locos al volante) o contar con la libertad de un coche de alquiler para recorrer Mahé de norte a sur (con calma por los atascos y cuidado al volante por las curvas).

Mahé es una isla que está rodeada de playas, por lo que no tendrás problema para encontrar la que mejor se adapte a ti. En resumen: la zona noroeste es la más turística y cuenta con playas con más servicios. Las del sur y del este son más salvajes y vírgenes. Al oeste las playas tienen más oleaje, por lo que es ideal para los surfistas. Como recomendación general para elegir la playa perfecta también tendrás que estar atento a las mareas. Cuando es la pleamar, la marea más alta, algunas playas se quedan sin arena. Y cuando es la bajamar, la marea más baja, ha hay que andar mucho hasta el agua para conseguir darse un baño.

Anse Beau Vallon

Es la más popular para los viajeros. Tiene varios kilómetros de largo con muchos bares, en la parte del paseo que hay a la espalda, y servicios (por la noche montan varios puestos callejeros de pescado fresco, rico y barato). Se accede fácilmente y está cerca de muchos alojamientos de la zona. Nosotros nos quedamos en un hotel muy apañado que tenía muy buenas valoraciones, a dos minutos de la playa, el Sun Resort Hotel. Si quieres comparar, estos son los mejores hoteles de la zona de Beau Vallon.

Anse Royal

Esta playa, situada en la costa este, es otra de las opciones preferidas para muchos. Tiene un acceso muy sencillo junto a la carretera. Es una playa larga de arena fina y agua tranquila. Desde el mar la foto es muy bonita con el bosque y las palmeras de frente. También tiene bares y servicios para el que los quiera.

Anse Takamaka

Esta playa, al sur, tiene el aliciente de ser virgen y salvaje. Si buscas tranquilidad, este es tu sitio. No suele estar muy frecuentada por turistas. Para llegar a ella, sobre todo si tienes tu base de operaciones en el norte, tendrás que tener paciencia porque casi que hay que cruzar la isla al completo.

Anse Soleil

Llegar a esta playa, situada en el oeste, no es tan sencillo. Es una playa pequeña muy bonita. El único riesgo que tiene es que, normalmente hay oleaje fuerte, sobre todo, en los meses de verano.

Silhouette, nuestro paraíso

Después de estar en Mahé, la siguiente etapa suele ser Praslin o La Digue. Nosotros en este viaje queríamos buscar algo más remoto, un paraíso por descubrir. Con las recomendaciones de la Oficina de Turismo de Seychelles empezamos a soñar con Silhouette, esta isla situada a 40 minutos en barco del puerto de Bel Ome, en Mahé (solo se puede llegar en barco privado organizado desde algunos de los hoteles que hay en la isla).

Como hicimos en nuestro viaje a Maldivas, queríamos descubrir las mejores islas y todas las opciones para viajar con presupuestos bajos, medios y de lujo. Por supuesto, aquí también queríamos darnos un homenaje. Al menos una vez en la vida hay que ir a Seychelles. Y, al menos una vez en la vida, también hay que disfrutar de una isla paradisíaca.

La Isla de Silhouette es un tesoro natural. Se trata de uno de los lugares más biodiversos del Índico Occidental. De hecho este espacio es un Parque Nacional protegido. En su pequeño puerto nos recogieron Aurore y Pierre, una joven pareja francesa que regenta La Belle Tortue. Este pequeño lodge y gastronomic restaurant no tiene nada que ver con los gigantescos hoteles impersonales de las islas. Pocas habitaciones con acceso a una playa privada, trato personalizado y un restaurante frente al mar que en el que Pierre, cocinero profesional, te hará llegar al climax.

Durante tres días exprimimos al máximo nuestra estancia en la tercera isla más grande de las Seychelles. Por la mañana, antes de que amaneciera, nos adentrábamos en el bosque lleno de especies endémicas para ver nacer la jornada en sitios diferentes. Durante el día, paseando, buceando o leyendo en la orilla, fuimos felices. Y por la noche, cuando llegaba el momento de la cena… ¡pecado capital! Cómo estaba el pescado fresco, y las croquetas de bonito, y los postres…

Praslin

La Isla de Praslin es la segunda más grande. En los casi 40 kilómetros cuadrados que mide están algunas de las mejores playas del planeta. Además, allí se puede visitar la Reserva Natural Valle de Mai, conocida por alberga el Coco de Mar, al árbol con la semilla más grande del mundo (llega a pesar 20 kilos).

Para llegar desde Mahé se puede usar algunos de los barcos que unen este trayecto en menos de una hora por unos 50 – 60 € (aquí os dejamos los horarios). También se puede volar en avioneta con Air Seychelles. Unos 15 minutos de vuelo y el precio es casi el doble que el barco. Entre Praslin y Mahé las frecuencias son más habituales y hay barcos cada 15 minutos. El precio del billete es de unos 15 euros.

Anse Lazio

Esta playa es la más conocida de Praslin. Tiene un acceso fácil en transporte público o en coche. Es una pasada la conjunción de agua cristalina, arena blanca y rocas de granito. Esta playa es perfecta para tomar el sol, nadar o hacer snorkel. La única pega es que suele estar muy concurrida. Por eso tendrás que madrugar o andar unos 500 metros hasta una parte más alejada.

Anse Georgette

Está playa, preciosa, es todo lo contrario a la anterior. Llegar a ella es más complicado pero, por eso, estarás más tranquilo. Se puede acceder por Mont Plaisir (caminata de 1 hora; ojo, que solo está abierto el camino de 9 a 16 horas) o a través del resort Constance Lemuria (25 minutos de caminata pero es necesario avisar al hotel con antelación). Es un lujo bañarse aquí y caminar por la playa. Es esfuerzo merece la pena.

La Digue

La Digue es la cuarta isla en tamaño de Seychelles. Solo tiene 10 kilómetros. Y decir La Digue es sinónimo de decir Playa Anse Source D´Argent, la playa más fotografiada del planeta y una de las más bonitas del mundo.

Para viajar desde Mahé a La Digue se puede ir en catamarán en un viaje un poco más largo que a Praslin (75 euros). Entre ambas islas, como te decíamos antes, el servicio es más frecuente.

Anse Source D´Argent

La Playa Anse Source D´Argent tiene la combinación perfecta de arena blanca, agua cristalina (si la marea respeta) y piedras graníticas que parecen labradas por un artista. Este rincón soñado del planeta se sitúa en la parte suroeste de la isla. Más allá de la controversia de ser la mejor playa del mundo o no (estamos seguro que para cada persona del mundo su mejor playa será una diferente), lo cierto es que es un lugar impresionante para darse un buen baño y, por supuesto, para hacer muuuchas fotos.

No es la única playa de la isla. Otra playa que goza de mucha fama y que a mucha gente le gusta incluso más, es Playa Anse Cocos. Desde la Playa de Petit Anse sale un sendero que une estas playas en menos de 10 minutos. Al final de la playa hay una piscina natural (depende de la marea) en la que hay buen snorkel.

Justo al lado de Petit Anse, está la playa grande, Gran Anse. Es una playa mucho más larga, con agua profunda para poder bañarse y un paisaje que también sobrecoge.

Mucho más que playas

Las Islas Seychelles, y su isla principal, Mahé, son mucho más que playa. Uno de los días que tuvimos lo aprovechamos para conocer Victoria, la capital más pequeña del mundo. Una ruta por esta ciudad de 25.000 habitantes puede empezar en el mercado. Muy pequeño y con un toque isleño inevitable, acumula pescado recién capturado, frutas y especias. Muy cerca está el Templo Hindú, uno de los edificios más especiales de la isla principal.

A las afueras de Victoria también visitamos el Jardín Botánico (100 Rupias / 6 euros). En este espacio se reúnen las especies más representativas de todas las islas, incluido el único coco de mar, genuino de Praslin y Curiuse. También se puede ver a uno de los animales más increíbles, las tortugas gigantes de Seychelles. Esta subespecie, uno de los reptiles más amenazados del mundo, ya solo puede verse aquí en cautividad. En este parque tendrás la oportunidad de sentirlas muy de cerca.

Cómo llegar a Seychelles

Para llegar a Seychelles la mejor opción, sin duda, es volar hasta Mahé. No hay vuelos directos desde España pero hay muchas opciones para conectar con las aerolíneas del Golfo Pérsico. Puedes encontrar los vuelos más baratos para Seychelles y compararlos aquí sin problemas. Buscando con tiempo, se pueden encontrar billetes a precios asequibles.

Cuándo es la mejor época para viajar a las Seychelles

Las Seychelles es uno de los países más seguros para viajar del mundo, naturalmente hablando, ya que no sufren las inclemencias de tifones ni terremotos.

Las mejores épocas para visitar las islas son los meses de octubre, noviembre y abril y mayo, con buen tiempo, mar calmado y precios más bajos. Junio, julio, agosto y septiembre también son buena época para ir pero hace más calor y es temporada alta. Tal vez, por las lluvias, los meses que se pueden evitar son enero, febrero y marzo. Para ampliar información práctica, llévate esta guía de viaje y siempre estarás bien informado.

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