Cuaderno de viaje: qué ver y qué hacer en Buenos Aires

Actualización: 25 enero, 2023

La capital argentina, Buenos Aires, estaba frente a nuestros ojos. Llegábamos desde el Río de la Plata (por Uruguay). Rascacielos, zonas boscosas, un gran frente portuario y muchos planes por delante.

La ciudad evocada en miles de páginas de revistas de viajes, programas de tv, el cine, los libros, estaba a un paso. Afortunadamente para nosotros, no llegábamos solos. Raquel, una madrileña por el mundo, nada más leer la noticia de nuestro aventura en los periódicos digitales se decidió a escribirnos para abrirnos las puertas de su casa. Junto a Santi, su novio, y sus perros, Bumy y Espinacas, nos dieron el mejor recibimiento posible: una cena a base de tortilla de patatas, salmorejo y croquetas caseras.

Cómo dormir en la vuelta al mundo

Imprescindibles que ver en Buenos Aires

Microcentro

Con todo el día por delante, a la mañana siguiente, nos pusimos la ropa de trabajo para conocer una de las zonas más turísticas de la ciudad: el Microcentro. Paseamos por la interminable Avenida Corrientes (cruza con la famosa Avenida 9 de Julio donde se puede ver el Obelisco y el Teatro Colón), la Casa Rosada (Casa de Gobierno) o la popular Calle Florida. Inevitablemente cualquier paseo por la capital debe empezar por aquí.

El Microcentro es la zona más antigua de la ciudad y es el centro financiero considerado por los porteños como uno de los barrios de la ciudad a pesar de no estar reconocido oficialmente como tal. Su ubicación se superpone aproximadamente con el barrio de San Nicolás y parte del de Monserrat y está limitado por la Avenida Córdoba y la Avenida de Mayo. Allí se puede ver la Plaza de Mayo con el Cabildo, la Manzana de las Luces (unos túneles coloniales), la Iglesia de San Ignacio de Loyola, el Museo de la Ciudad, la Catedral, la Plaza del Congreso, el Palacio Barolo y las iglesias de Monserrat, San Francisco y Nuestra Señora del Rosario.

En la calle Florida es donde se dan cita los «arbolitos», los cambistas que controlan el mercado alternativo de divisas. Aunque parezca increíble para un turista, además de la guía de la ciudad, es conveniente leerse un manual de cambio de divisas para hacer rentables las vacaciones. Se gana mucho más dinero al cambio (no es ilegal, es una cuestión alegal). La explicación es compleja pero se puede hacer sencilla:

Cambio de divisas:

1. Hay que llevarse dólares o euros para cambiarlos en el mercado alternativo (en la calle Florida) al cambio del «dólar-euro blue». Fundamental, nada de pagos con tarjeta ni cajeros en ningún sitio, siempre dinero en efectivo.
2. Al grito de «cambio, cambio» puedes consultar por el mejor precio del día. Hay muchos cambistas y puedes comparar.
3. Cuando lo hayas decidido, sin necesidad de entrar en ninguna casa de cambio, sino en la misma calle, compruebas los billetes que no sean «truchos» y los cambias.
4. ¡Disfruta de lo ganado! Como ejemplo, un viaje en bus de 1.000 pesos argentinos pasará a costarte 91 euros al cambio oficial y 70 euros con el cambio «blue». ¡Has ganado 21 euros!

Centro Buenos Aires

Pero independientemente de la economía doméstica y otras historias mínimas que completan las tertulias de los magazines, la Ciudad de Buenos Aires tiene tantos rincones para perderse como barrios.

Te interesa...

  • Esta visita guiada por Buenos Aires disfrutando de los principales barrios, avenidas y monumentos de la ciudad. Súper económico y con cancelación gratuita hasta tres días antes.

Puerto Madero

Por eso para terminar la jornada, nos dirigimos a Puerto Madero, ubicado junto al Río de la Plata. Se trata de  uno de los barrios más exclusivos de la ciudad y compone un entorno muy agradable para pasear y cenar en las terrazas de sus múltiples restaurantes. Se puede cruzar por el vistoso Puente de la Mujer, obra del artista Santiago Calatrava.

¡Oferta inteligente!

  • Dos en uno: navega en barco por el Río de la Plata y descubre Montevideo, la capital de Uruguay.

Chacarita

Al día siguiente, de la mano de Raquel y Santi, cogimos las bicicletas para conocer la otra ciudad de los porteños. Empezamos por los muertos. Parecerá feo pero aquí la veneración hacia los que se fueron es mayúscula. Hay dos grandes cementerios con ilustres, el cementerio de la Recoleta y el cementerio de Chacarita. Fuimos al último por ser más grande y por supuesto para ver la tumba de un símbolo del país, Carlos Gardel; artistas, políticos, deportistas, completan la magna lista.

YouTube video

A la hora de comer visitamos un clásico, El Imperio de las Pizzas, para seguir con la buena tradición pizzera que empezamos el día anterior en la Pizzería Güerin. Y para hacer la digestión, entre pedaleada y pedaleada, una parada en el Mercado de las Pulgas, un lugar donde todo lo reutilizado consigue categoría de obra de arte.

Palermo

Lo siguiente que tocaba era conocer el barrio más extenso y verde, el barrio de Palermo en su máxima efervescencia, un día feriado. Un paseo, primero, por el Palermo Soho (dentro de Palermo Viejo), donde los bares cambian sus mesas por percheros con ropa que alquilan en los días de fiesta, las cuidadas librerías enganchan desde el primer minuto y donde el diseño se ha apoderado de todas las tiendas del distrito.

Después, más pedaleadas entre los elegantes viviendas, centros comerciales, los Bosques de Palermo y bellas avenidas arboladas (Palermo Chico). Si tienes tiempo cerca está el Jardín Botánico.

Recoleta

De camino a nuestra próxima parada, y con los últimos rayos de sol, todavía nos quedó tiempo para ver Recoleta. Nos quedó por ver el cementerio porque nos quedamos ya sin luz.

El barrio destaca por sus arquitecturas, monumentos históricos y sus grandes espacios culturales, entre los que se encuentran el Museo Nacional de Bellas Artes (conocido como Museo de Arte), el Centro Cultural Recoleta, la Biblioteca Nacional, la Basílica de Nuestra Señora del Pilar, la Floralis Genérica, la animada Avenida Alvear. Nosotros no pudimos resistirnos y entramos en el Ateneo Grand Splendid, la librería comercial más bella del mundo.

Librería Ferrovía en Santa Fé

Unos cuantos kilómetros más hacia el centro, llegamos al que iba a ser el colofón del día. Lógicamente, cual extranjero en Argentina, queríamos ver espectáculos de tango, el baile y cante por antonomasia del país. Eso lo teníamos claro. También habíamos decidido que nada de cena con show.

Y en estas nos sorprendió Santi con una propuesta local y auténtica. Nos llevó a una milonga al Tango Yira Yira, en Balvanera. La milonga es un género musical y una danza parecida al tango (nació a finales del siglo XIX).

Un buen libro para no perderse nada de esta cultura musical en la capital es «Buenos Aires baila tango» de Gabriela Kogan, que nos regaló Santi.

¡Sorprende a tu pareja con esta experiencia!

  • Un espectáculo de tango, cena en El Querandi, uno de los lugares más íntimos para apreciar este arte, y recogida y traslado hasta tu alojamiento.

La que fuera asociación de carboneros en otra época, acoge primero unas clases de tango (75 pesos, 5,2 euros con acceso a la milonga) y después la milonga (25 pesos, 1,75 euros). A lo primero ni tan siquiera nos atrevimos. No es este baile disciplina sencilla ni dada a las bromas. Así lo tomamos, al menos hasta que entramos en calor. Al final, aunque a regañadientes, MJ se animó.

YouTube video

La Boca

El último día en la capital porteña lo dejamos para lo evidente: los paseos por La Boca y San Telmo. Coincidió en el barrio con más color de la gran urbe el partido de fútbol de su equipo, el Boca Juniors, más que una religión.

Estadio La Bombonera

Aquí, en estas calles, puede verse el retrato de uno de los representantes de Dios en la Tierra, Diego Armando Maradona, y a los pocos pasos, al otro, el Papa Francisco, ambos compatriotas. También puede verse a la simpática Mafalda, que nació en la prensa argentina.

La construcción de las casas en la zona se realizó a base de madera y chapas pintadas con innumerables y llamativos colores procedentes de la pintura que sobraba en el puerto. La principal de las atracciones del barrio de La Boca es la pintoresca calle peatonal Caminito.

San Telmo

Tiene color, sabor y poco más este inflado reclamo turístico con más necesidades que cosas pueda ofrecer. Aunque durante el día La Boca es uno de los barrios más memorables de la ciudad, al caer la noche se convierte en uno de los más peligrosos, por lo que conviene hacer la visita por la mañana. Tampoco es buena idea alejarse mucho de las calles más turísticas.

San Telmo

San Telmo es otra cosa (mejor en horario laboral o en fin de semana). Este barrio es uno de los más antiguos y tradicionales, y ha sido un testigo impasible de gran parte de los hechos trascendentales de la historia de la ciudad.

El corazón de San Telmo está formado por la Plaza Dorrego, la más antigua de la ciudad después de la Plaza de Mayo (cada domingo se convierte en el escenario de una peculiar feria de antigüedades), e innumerables edificaciones coloniales.

¿Cómo llegar del Aeropuerto Internacional de Ezeiza al centro de la ciudad?

  • No hay ninguna línea de tren o metro que conecte directamente Buenos Aires con el aeropuerto, pero existen combinaciones baratas y buses privados. Pero si buscas comodidad puedes reservar traslados con un mínimo de 24 horas de antelación y conocer la tarifa antes de contratar.

A pesar de todo ello, Buenos Aires tal vez sea de las ciudades que conviene más vivirlas que visitarlas. Hay una propuesta cultural para cada día.

Raquel y Santi, dos enamorados de la cultura y la literatura, de hecho él es dueño de la Librería Ferrovía en Santa Fé, nos contagiaron de ello. Nos descubrieron rincones, librerías, bares… E incluso proyectos laborales y sociales apasionantes para un mundo mejor, como el de la cooperativa editorial Eloísa Cartonera. Llegamos queriendo a la capital y gracias a ellos nos marchamos amándola.

Hoteles en Buenos Aires

Si no tienes la fortuna de convivir con una familia tan encantadora como la de Raquel y Santi, puedes hospedarte en cualquiera de estos tres hoteles que se encuentran en el corazón de Buenos Aires: Hotel Dorá, NH Crillón o Dazzler by Wyndham.

Comer en Buenos Aires

Encontrar un lugar para comer en Buenos Aires no suele ser un problema, los argentinos disfrutan con la comida y es fácil encontrar tradicionales parrillas, además de una gran cantidad de pizzerías extendidas por toda la ciudad.

Algunas de las zonas más recomendables para comer son Puerto Madero, una zona algo más cara pero que resulta agradable, y la animada Plaza Serrano (Plaza Cortázar), ubicada en el corazón de Palermo Soho. ¡Y no olvides de probar el mate, las empanadas de carne, el chorizo criollo, las milanesas (carne rebozada), el locro (entre una sopa y guiso) o los sorrentinos (pasta rellena)!

Gastos de viaje de la capital argentina (precios 2014)

  • Día 1: transporte tarjeta SUBE 20 pesos (1,4 euros) + comida 70 pesos (5,2 euros) + libro 15 pesos (1 euros) + empanadas 50 pesos (3,5 euros). Total: 165 pesos (11,5 euros)
  • Día 2: comida 250 pesos (17, 6 euros) + café 80 pesos (5,6 euros) + milonga 75 pesos (5,2 euros) + snacks 20 pesos (1,4 euros). Total: 425 pesos (30 euros)
  • Día 3: lavandería 50 pesos (3 euros) + comida 290 pesos (20 euros) + recarga transporte SUBE 10 pesos (0,70 euros). Total: 350 pesos (24,6 euros) *

* El cambio de pesos a euros lo haremos teniendo en cuenta el cambio oficial. Cuando hayamos pagado con dinero cambiado al cambio extra oficial (euro blue) lo marcaremos con un asterisco. (Esto lo ponemos debajo de todos los gastos que incluyamos).

Mapa de Buenos Aires

¿Qué te ha parecido nuestro post sobre qué ver en Buenos Aires? ¿Incluiríais algo más para este viaje? ¡Cuéntanos! Estamos deseando leer tus propuestas y experiencias. ¡Deja tu comentario más abajo!


Organiza tu viaje y ahorra mucho dinero con estos enlaces:


¿Quieres seguir leyendo más aventuras? Suscríbete al blog

   

1 comentario en «Cuaderno de viaje: qué ver y qué hacer en Buenos Aires»

Responder a Carmengv

  Acepto la política de privacidad.